Entrevistamos a Inés del blog de viajes, Mis Viajes Por Ahí, que recientemente ha estado en Islandia para conocer el país y su cultura. Ha estado una semana y le ha parecido poco, así que ganas no le faltan para volver y contarnos más acerca de Islandia en su blog.
¿Por qué has decidido viajar a Islandia? ¿Te lo ha recomendado alguien?
Siempre he querido ir a Islandia, me llama la atención la mezcla del frío y del calor, que en un mismo lugar puedas ver fumarolas humeantes pero con nieve alrededor. No en todas partes puedes ver elementos naturales como glaciares, campos de lava o géiseres. Además, por su carácter insular nos encontramos en Islandia con una cultura única entre sus habitantes.
Sí, realmente este destino me lo ha recomendado mucha gente. No conozco a una sola persona que haya estado en Islandia y que no le haya fascinado.
¿Cómo has organizado el viaje?
A través de blogs y ojeando el cuaderno de viaje que me entregaron en Islandia Tours, en él viene detallada una ruta por Islandia muy completa.
¿Qué lugares has visitado y por qué?
He intentado hacer una ruta lo más variada posible. Menos mal que como en verano en Islandia no se hace de noche, pude aprovechar los días al máximo.
Comencé mi ruta en el llamado Círculo de oro: el Parque Nacional de Thingvellir, la inmensa catarata de Gullfoss, las erupciones de agua de Geysir, la cascada Seljalandsfoss de 60 metros de altura que puede rodearse, para terminar acampando frente a la catarata de Skógafoss. El segundo día del viaje fue el que más me impactó. Lo primero que hicimos fue visitar la playa de arena negra de Dyrhólaey, a continuación nos acercamos a ver las columnas de basalto de la playa de Reynishverfi. Aquel día condujimos muchos kilómetros a través de campos de lava cubiertos por un musgo grisáceo que le daban un aspecto muy surrealista. Además vimos algo que nunca había conocido: un impresionante glaciar (el de Svinafellsjokull) e icebergs flotando en el lago Jökulsarlón.
El tercer día fue más relajado. Primero hicimos una caminata por las montañas de colores Stafafell. De camino al pueblecito tradicional de Seydisfjördur nos topamos con hermosas cascadas, manadas de renos y paisajes nevados… aunque pinchamos una rueda del coche, fue entonces cuando nos dimos cuenta de lo amables que son los islandeses.
El cuarto día fuimos al parque Natural de Jökulsargljúfur donde nos quedamos boquiabiertos ante las cataratas de Selfoss y la de Dettifoss (ésta además fue el lugar de rodaje de la primera escena de la película Pometheus). De camino al lago Myvatn nos paramos en las fumarolas de Námafjall Hverir, me llamó la atención una en concreto que expulsaba ácido sulfúrico. Cómo no, nos embarcamos en Husavik para ver ballenas, ¡vimos montones de ellas! Y el final del día fue mágico: en una colina de Husavik vimos sumergidos en agua termal una especie de atardecer que no llega a concluir.
El quinto día estuvimos por los alrededores del lago Myvatn: el cráter de Viti, la cueva de Grjótagjá con agua a 50°C en su interior y las formaciones de lava de Dímmuborgir. Después nos dirigimos a la fotogénica catarata de Godafoss y a continuación a la segunda ciudad de Islandia, Akureyri.
El sexto día visitamos la encantadora y animada ciudad de Reykjavik y salimos de fiesta en su famoso “Rúntur”.
¿Qué es lo que más te ha llamado la atención del país?
La luz. Islandia tiene un aspecto de iluminación artificial, como de un decorado… hay que verlo.
¿Con quién has decidido emprender este viaje?
Realicé el viaje con mi pareja y con amigos.
¿Qué tipo de alojamiento escogiste? ¿Acampastéis?
Todos los días dormimos en campings: llevábamos tiendas, sacos de dormir para bajas temperaturas, camping gas… En Islandia hay muchísimas zonas de camping y además la acampada es libre en cualquier lugar, así que para los que tenemos un presupuesto ajustado, siempre nos queda esta opción. Me sorprendieron las instalaciones de cada camping, por sólo 6€ dispones de duchas, internet o cocina. Además todos estaban situados en parajes preciosos. Islandia es el paraíso del camping.
¿Has escogido alguna excursión guiada?
Sí para ver ballenas en Husávik. Además de observarlas desde el barco, la guía nos iba explicando cuestiones relacionadas con la forma de vida de estos animales.
¿Y los islandeses?
Los islandeses son muy amables y simpáticos. Si preguntas a una persona por una calle o un monumento, parece crearse una competición alrededor de ti por ver quién te da las mejores indicaciones. Siempre contestan con una sonrisa y tienen un gran sentido del humor.
Como curiosidad, los islandeses parecen tener una prenda nacional. Tanto niños, como personas mayores o adolescentes independientemente de su sexo visten con un jersey de lana llamado “Lopapeysa”. Me hubiera gustado traerme uno pero era realmente caro, la lana de oveja islandesa tiene su caché.
Fotos: Inés – Mis Viajes Por Ahí