Trolleando por Islandia
Hay muchos tipos de trolls. Los hay en cuentos de brujas y hadas madrinas, su papel en los mitos varía desde gigantes diabólicos hasta seres parecidos a los hombres que secuestran niños. En el folclore escandinavo son bastante conocidos, tanto es así que en Islandia tienen sus propias estatuas y mitos, como los círculos de hadas, de los que ya hablamos.
En la Playa de Vík, encontramos unas magníficas representaciones de estos seres, según los propios islandeses se trata de trolls verdaderos convertidos en piedra al ser sorprendidos por el sol. Los más escépticos y especialistas geólogos señalan que se trata de formaciones rocosas originadas por la erosión del fuerte oleaje del mar del Norte. Los Reynisdrangur, como los llaman, son sin ninguna duda una de las maravillas de la zona de Vík, una protuberancias siniestras y misteriosas que llegan a alcanzar los 66 metros de altura.
Pero no solo hay formaciones rocosas similares a los trolls, también paseando por las calles de Reykjavik, en Laugavegur encontramos dos simpáticas figuras que funcionan como reclamo a multitud de turistas. Excepcionalmente los Huldufólk –personas escondidas en islandés- están más visibles que nunca
En ocasiones, el fanatismo islandés por los mitos y los misteriosos seres llega al punto de paralizar (temporalmente) las construcciones de las carreteras. Como ocurrió en la península Alfanes, en el suburbio de Reykjavík, ya que el asfaltado del camino representaba una amenaza a la vida de elfos y trolls. ¡Pobres!
Y ¿Vosotros sois tan fanáticos? ¿Creéis en los mitos escondidos de Islandia?
